Solo 4 aerolíneas sobrevivirían sin utilizar el asiento central
UNA MEDIDA INVIABLE PARA LA INDUSTRIA AÉREA
La ocupación máxima permitida pasase al 62%, un porcentaje muy inferior al 77% que se necesita para que un vuelo sea rentable
Con independencia del coste, IATA argumenta que el distanciamiento social en los aviones no ayudaría a reducir el riesgo de contagio.
La medida planteada de bloquear el asiento central de los aviones para minimizar el riesgo de contagio es inviable económicamente para la práctica totalidad de compañías aéreas. La conclusión de un informe de IATA es demoledor: solo sobrevivirían cuatro de las 122 aerolíneas que han sido objeto de análisis.
El lobby aéreo explica que esta limitación provocaría que la ocupación máxima permitida pasase al 62%, un porcentaje muy inferior al 77% que se necesita para que un vuelo sea rentable. La única opción sería aplicar un incremento drástico de las tarifas. Para alcanzar un punto de equilibrio, el precio medio del billete debería subir entre un 43% y un 54%, dependiendo de la región (Las aerolíneas encarecerán un 50% los billetes con el asiento central vacío).
“Las aerolíneas están luchando por su supervivencia y la eliminación del asiento central solo contribuiría a elevar los costes”, remarca el director general y CEO de IATA, Alexandre de Juniac. Avisa que una limitación de esta índole solo se podría compensar con tarifas más altas, lo que supondría “el fin de los viajes asequibles”. “De no ser así, las aerolíneas se irían a la quiebra”, sentencia.
Con independencia del coste, IATA argumenta que el distanciamiento social en los aviones no ayudaría a reducir el riesgo de contagio. “Las autoridades recomiendan de uno a dos metros de distancia entre individuos, mientras que el ancho promedio del asiento es inferior a 50 centímetros”, apunta.