Airbus y Boeing, ante el reto de fabricar 11.817 aviones
SE LES ACUMULAN LOS PEDIDOS
Airbus cerró 2022 con una cartera de pedidos de 7.239 aeronaves comerciales, mientras que en el caso de Boeing ascendió a 4.578. Ambos fabricantes se vieron obligados a ralentizar la producción por problemas con la cadena de suministros
Aunque su situación es bien distinta, Airbus y Boeing, los dos grandes fabricantes de aviones del planeta, tienen ante sí el mismo reto: acelerar la producción para cumplir con un volumen de pedidos cada vez mayor (Airbus y Boeing se reparten la mayor compra de aviones de la historia).
Los problemas con la cadena de suministros han provocado que ambas compañías hayan tenido que revisar a la baja sus planes de entrega de aeronaves, lo cual se refleja en el creciente volumen de pedidos que acumulan (11.817 entre ambos).
Airbus, por ejemplo, concluyó 2022 con 7.239 aeronaves comerciales aún por entregar, lo que supone un aumento del 2,2% en comparación con los 7.028 que acumulaba en la recta final de 2021. El fabricante entregó en los 12 meses 661 aviones a 84 clientes y registró 820 pedidos netos (Airbus desborda a Boeing en órdenes y entregas).
Algo similar ocurre con Boeing. A 31 de diciembre de 2022, su cartera de pedidos de aviones comerciales ascendía a 4.578, un 7,7% más que en la misma época del año anterior, cuando se situaba en 4.250. Al igual que su competidor, las nuevas órdenes recibidas en 2022 superan a las entregas, con 774 frente a 480.
Volcados en cumplir con sus compromisos
Los máximos responsables de ambos grupos reconocen abiertamente las dificultades para cumplir con las entregas, fijándose como objetivo prioritario intentar corregir dicha situación en los años venideros (Revés para Airbus: “Vamos a tener grandes problemas con el suministro”).
“En 2022 atendimos a 84 clientes con 661 entregas, un aumento del 8 % en comparación con 2021. Obviamente, eso es menos de lo que buscábamos, pero dada la complejidad del entorno operativo, quiero agradecer a los equipos y a nuestros socios por el arduo trabajo y el resultado final”, explica Guillaume Faury, consejero delegado de Airbus.
“La importante entrada de pedidos que cubre todas nuestras familias de aviones, incluidos los cargueros, refleja la solidez y competitividad de nuestra línea de productos. Continuamos nuestra trayectoria de aceleración para cumplir con nuestra cartera de pedidos”, se limita a decir.
Por su parte, el presidente y director ejecutivo de Boeing, Stan Deal, destaca que “en 2022 trabajamos duro para estabilizar la producción del 737, reanudar las entregas del 787, lanzar el 777-8 Freighter y, lo que es más importante, cumplir con los compromisos de nuestros clientes”.
“A medida que la industria de las aerolíneas expande su recuperación, estamos viendo una fuerte demanda en toda nuestra familia de productos, en particular el altamente eficiente 737 Max y el 787 Dreamliner. Nos mantendremos enfocados en impulsar la estabilidad dentro de nuestras operaciones y la cadena de suministro mientras trabajamos para cumplir con nuestros clientes en 2023 y más allá”, sentencia.
