FAA abre investigación contra Boeing
12/01/2024 Aero-naves.com (Chile) – Nota
La Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos abre una nueva investigación contra Boeing. El objetivo es determinar su eventual responsabilidad en las causas que provocan la emergencia del B737-9 en el vuelo de Alaska Airlines AS1282.
La investigación de la FAA busca determinar si Boeing se asegura de que las partes y componentes terminados cumplen con el diseño aprobado. Señala, además, si ese diseño cumple con las condiciones para operar de manera seguridad de conformidad con las regulaciones.
“Este incidente nunca debería haber sucedido y no puede volver a suceder” , sentencia la FAA.
La autoridad aeronáutica de los Estados Unidos confirma también que la autorización para que los B737-9 puedan volver a volar sigue siendo incierta. La extensión en el tiempo de la medida puede comprometer capacidad de algunas líneas aéreas, especialmente, aquellas que han iniciado una renovación de flota con este modelo.
Con la paralización del B737-9, Alaska Airlines tiene comprometido el 20% de su capacidad total. En el caso de United, la medida sólo afecta al 8%. Algo distinta es la situación de Copa Airlines y Aeroméxico con 29 y 19 aviones de este tipo, respectivamente. Las compañías aéreas latinoamericanas tienen menor margen para compensar la capacidad detenida en comparación con las estadounidenses. Ante esta situación, se esperan más cancelaciones de vuelos para los próximos días.
“Las prácticas de fabricación de Boeing deben cumplir con los altos estándares de seguridad que legalmente deben cumplir”, agrega la FAA.
Un dolor (necesario) de cabeza.
Después de los accidentes de 2018 y 2019 que llevan a la paralización de todo el programa B737 MAX, la investigación de la FAA no es una buena noticia para Boeing. A pesar del total compromiso del fabricante por colaborar con la investigación, existe una incertidumbre respecto a los plazos.
La FAA señala que no tiene prisa por esclarecer las causas del B737-9. Pese al impacto que la medida tiene para la industria y, en especial para los viajeros, la autoridad cumple con garantizar que la seguridad sea la prioridad número uno.
“La seguridad del público que vuela, no la velocidad, determinará el cronograma para que el Boeing 737-9 Max vuelva a estar en servicio” , sentencia la autoridad aeronáutica estadounidense.
Pese a su repunte en las ventas, el programa B737 MAX se ha convertido en un dolor de cabeza para Boeing. Primero con la paralización que afecta mayoritariamente a los B737-8 y, ahora, con los B737-9. Un punto que preocupa es la incertidumbre para los otros modelos considerando la certificación de los B737-7 y el B737-10, junto con el B737-8-200.
El B737-8-200 junto con el -10 utilizan la puerta de emergencia para brindar más capacidad en cabina. Ryanair es el único operador del B737-8-200. En la fábrica de Renton, también se aprecia el primer B737-8-200 para Allegiant.
Posición de Boeing
Tras ser notificado de la investigación por parte de la FAA , Boeing reitera su compromiso y colaboración para esclarecer las causas de la investigación. En esa línea, mantiene la postura dada a conocer por su CEO, Dave Calhoun.
“Cooperaremos total y transparentemente con la FAA y la NTSB en sus investigaciones”, declara Boeing.
Calhoun señala que la investigación respecto al B737-9 se abordará con total transparencia en cada paso del camino. Para asegurar la confianza del público, menciona las acciones que debe mostrar el fabricante de cara a solucionar y garantizar las soluciones sobre este problema.
“Tendremos que demostrarlo con nuestras acciones, con nuestra voluntad de trabajar directa y transparentemente con ellos (los clientes). Y para asegurarnos de que comprendan que cada avión en el que Boeing tiene su nombre y, que está en el cielo es, de hecho, seguro” , dice Calhoun.