Norwegian: las tarjetas de crédito exigen garantías
Estas retenciones llevadas a cabo por empresas emisoras de tarjetas de crédito ya fueron parte de la causa de los problemas de efectivo de la aerolínea Flybe y Frontier Airlines.
Norwegian sigue siendo un pozo sin fondo y ha multiplicado por 30 sus pérdidas en el primer trimestre.
Los operadores de tarjetas de crédito reclaman a Norwegian depósitos adicionales, empeorando todavía más sus problemas de liquidez. Los proveedores de tarjetas están preocupados por la débil situación financiera de la noruega y, por ello, exigen una garantía en la venta de billetes de la compañía en caso de que la aerolínea termine por quebrar, según informa Bloomberg.
Estas “retenciones” llevadas a cabo por empresas emisoras de tarjetas de crédito ya fueron parte de la causa de los problemas de efectivo de la aerolínea Flybe y Frontier Airlines y, ahora, se está convirtiendo en un quebradero de cabeza para la escandinava.
En febrero de 2019, la aerolínea ampliaba su capital por 300 millones de euros para superar las dificultades financieras pero la situación no mejoró, debido, en parte, a la retención de pagos por parte de las compañías de tarjetas de crédito. La consecuencia de estas retenciones ha afectado de forma negativa en los resultados financieros en este primer trimestre (Norwegian: las tarjetas de crédito ya bloquean su dinero).
Norwegian ha anunciado unas pérdidas netas de 155 millones de euros en el primer trimestre de 2019. Unas cifras que multiplican por 31 el resultado negativo de 5 millones de euros del mismo período de hace un año. Parte de esta pérdida también se debe al veto de los Boeing 737 Max, lo cual ha afectado a los 18 aviones que tiene la compañía de este modelo. La ‘low cost’ ha calculado en 52 millones de euros el coste de la crisis de los 737 Max, aunque está haciendo todo lo posible para reclamar al fabricante aeronáutico estadounidense dichos gastos (Norwegian pierde 155 millones en el primer trimestre), (Norwegian: Kjos se reúne con Boeing para cobrar la factura de los 737 Max).
Asimismo, la compañía ha firmado con varias gestoras de tarjetas de crédito (compañías que procesan transacciones con tarjetas) para liberar más efectivo el próximo invierno. Aun así, la situación no es la más alentadora para la escandinava. Las nuevas normas contables exigen a las compañías incluir los arrendamientos de pasivos operativos en sus balances. Como resultado Norwegian ahora contempla casi 6.400 millones de euros de deuda neta.