01/12/2008 02:39
Ambito Financiero - Nota - Economía
- Pág.5
Aerolíneas: sólo
queda un día para negociar
La Cámara de Diputados aprobará
mañana el proyecto que declara de
utilidad pública y sujetas a expropiación
a las sociedades Aerolíneas Argentinas
y Austral, sin que el kirchnerismo deje
otra opción ya para destrabar el
conflicto entre el gobierno y el grupo Air
Comet-Marsans. Quedan así sólo
24 horas para intentar algún acuerdo
de último momento para morigerar
los efectos de la ley de expropiación
sobre las relaciones entre la Argentina
y España.
Las comisiones de Presupuesto y Legislación
General de Diputados le dieron vista favorable
al proyecto el jueves pasado y a pesar de
las objeciones de la oposición el
oficialismo no introdujo ningún cambio
en relación con el proyecto que elaboraron
los santafesinos Agustín y Alejandro
Rossi y el bonaerense Mariano West, que
luego fue convalidado en la Casa Rosada
por Carlos Zannini. Nada se dijo, entonces,
del peligro de una denuncia de Marsans contra
la Argentina ante el tribunal del CIADI,
que la propia empresa ya anunció
por unos u$s 1.560 millones. Así,
quedó claro que lo que comenzó
como una negociación entre el gobierno
y el grupo español para traspasar
el control de Aerolíneas Argentinas
en algún momento se fue de cauce
generando un conflicto que a la luz de esas
conversaciones originales ni siquiera muchos
kirchneristas entendieron.
Ese proyecto que se votará ahora
declara de «utilidad pública»
-conforme a lo que establece la Ley 21.499-
las empresas Aerolíneas Argentinas,
Austral, Cielos del Sur, y sus compañías
controladas Optar SA, Jet Paq SA y Aerohandling
SA. Se lo justifica en que la expropiación
se realizará para «garantizar
la continuidad y seguridad del servicio
público de transporte aerocomercial
de pasajeros, correo y carga; el mantenimiento
de las fuentes laborales y el resguardo
de los bienes de las empresas».
Todo debe hacerse antes de fin de año
para permitir que el gobierno inicie el
año firmando el decreto de traspaso
de Aerolíneas Argentinas y Austral
al Estado después de cumplimentar
los ritos legales que impone una expropiación.
Los bloques de la oposición no consiguieron
unificar una postura en común por
lo que llegarían al recinto divididos
sobre la forma en que debería llevarse
adelante la expropiacióny la necesidad,
como en el caso del radicalismo, de expropiar
sólo los activos y dejar que las
deudas de la empresa se resuelvan en la
quiebra judicial.
Esa postura también es apoyada por
el macrismo que planteó la expropiación
«sólo de activos», como
lo hicieron Esteban Bulrich y el radical
Rubén Lanceta.
Agustín Rossi, jefe del bloque kirchnerista,
adelantó la semana pasada que «vamos
a pagar cero peso por Aerolíneas»
y que «hay pasivos exigibles y otros
que no lo son». Todo en relación
con los u$s 890 millones de deuda de las
aerolíneas que el Estado terminará
asumiendo.
Rossi advirtió también, basado
en cálculos que hizo su bloque, que
con el proyecto opositor -de expropiar sólo
los activos de Aerolíneas- «el
Estado debe hacerse cargo de movida, de
$ 1.200 millones, por lo que la iniciativa
oficial es la mejor opción en términos
jurídicos, y la más redituable
en términos económicos».