16/11/2008 04:43
La Nación - Nota - Política
- Pág.12
Inédita crisis en
el control al Gobierno
>Las restricciones al fiscal Garrido
se repiten, con matices, en la Sigen, la
Auditoría General de la Nación
y la Oficina Anticorrupción
Paz Rodríguez Niell y Gabriel Sued
LA NACION
La Fiscalía de Investigaciones Administrativas
(FIA), que dirige Manuel Garrido, no es
un hecho aislado, sino el síntoma
de una enfermedad generalizada: la debilidad
de los organismos encargados de controlar
al Gobierno y detectar casos de corrupción.
Con matices, las restricciones y los inconvenientes
alcanzan a la FIA, que depende del procurador
general de la Nación, Esteban Righi;
a la Auditoría General de la Nación
(AGN), máximo organismo de control
de las cuentas del Estado, que asiste técnicamente
al Congreso; y a los organismos de control
interno de la administración pública:
la Oficina Anticorrupción (OA), bajo
la órbita del Ministerio de Justicia,
y la Sindicatura General de la Nación
(Sigen).
Poca autonomía para investigar,
excesiva politización, escaso presupuesto
y reformas normativas que restringieron
sus tareas son algunos de los problemas
que arrastran los organismos desde hace
muchos años y que se acentuaron en
la última etapa de poder kirchnerista.
Este año, el ministro de Justicia,
Aníbal Fernández, recortó
las atribuciones de los investigadores de
carrera de la OA, que ya no pueden abrir
expedientes ni pedir información
a otros organismos sin la firma del jefe
del organismo, Abel Fleitas Ortiz de Rozas,
un dirigente peronista cercano al ex jefe
de Gabinete Alberto Fernández.
Como resultado de la última resolución
de Righi, la FIA ya no podrá intervenir
en decenas de causas judiciales. Garrido
fue el único fiscal que se opuso
a que se cerrara el expediente por presunto
enriquecimiento ilícito contra los
Kirchner, a que se declararan ilegales las
grabaciones que se referían a las
coimas de Skanska y a que se ampliara la
polémica concesión de los
principales aeropuertos del país
en favor de Aeropuertos Argentina 2000,
la empresa de Eduardo Eurnekian.
Fue además quien pidió la
indagatoria del secretario de Comercio,
Guillermo Moreno, en el caso por la manipulación
de los índices del Indec, y la de
Ricardo Jaime por sobreprecios en la reparación
de trenes. Nada de esto habría podido
hacerlo si entonces hubiera existido una
resolución como la de Righi.
Desde la llegada de Néstor Kirchner
a la Casa Rosada, la Sigen bajó su
perfil y apunta más a detectar fallas
de gestión que irregularidades. Cuando
descubre alguna anomalía, ya no hace
la denuncia ante la Justicia, sino que remite
los informes a la OA. Desde diciembre pasado,
dirige el organismo Julio Vitobello, un
dirigente del PJ porteño que trabajaba
junto con Alberto Fernández en la
Jefatura de Gabinete.
Pese a que la reforma constitucional de
1994 diseñó a la AGN como
un organismo controlado por la oposición,
su colegio de auditores, el cuerpo que debe
aprobar todos las decisiones tiene mayoría
oficialista, al igual que la Comisión
Mixta Revisora de Cuentas del Congreso,
encargada de aprobar los informes del organismo.
"Los entes de control funcionan de
manera bastante deficiente. Hay debilidades
que tienen que ver con la fragilidad institucional
de esas dependencias y otras con la falta
de una planificación estratégica
del trabajo que realizan", dijo a LA
NACION Pedro Biscay, director ejecutivo
del Centro de Investigación y Prevención
de la Criminalidad Económica (Cipce).
Con él coincidió Luis Villanueva,
de la Asociación Civil por la Igualdad
y la Justicia (ACIJ). "Hay falencias
institucionales y estructurales en algunos
organismos, como la OA, que depende del
Ministerio de Justicia, o en la FIA, una
de las pocas oficinas que tiene un reconocimiento
público por su lucha contra la corrupción,
que quedó afectada por la decisión
de Righi", puntualizó.
En mayo de 2007, el kirchnerismo impulsó
un proyecto de ley que pretendía
limitar la autonomía de la AGN y
acentuar su dependencia respecto de la Comisión
Mixta Revisora de Cuentas, un cuerpo que
domina el oficialismo y que se reúne
muy pocas veces al año.
El Congreso nunca fue generoso con la AGN,
que tiene uno de los presupuestos más
bajos de los organismos de control de América
latina.
En 2007, su presupuesto representó
el 0,04 por ciento del presupuesto total
aprobado para ese año. De acuerdo
con un informe de la Asociación del
Personal de los Organismos de Control (APOC),
Chile (0,17), Brasil (0,11), Bolivia (0,08),
Perú (0,26) y otros nueve países
tienen más fondos que la AGN.
El presidente del organismo, el radical
Leandro Despouy, dijo a LA NACION que "con
frecuencia hay que vencer muchos obstáculos,
como la negativa de las autoridades a entregar
información, el marco jurídico
insuficiente y las críticas a la
necesaria visibilidad pública del
contralor, como aconteció con Garrido".
Despouy advirtió que, sin embargo,
se han obtenido muchos resultados tangibles,
como las labores de auditoría en
el traspaso de Aerolíneas Argentinas,
que han acreditado en favor del Estado algo
más de 2000 millones de pesos.
"Debemos actuar pensando que en definitiva
lo único que podrá compensar
la frecuente hostilidad oficial es la respuesta
de la estima ciudadana", afirmó
Despouy.
La OA tiene en este momento 6762 carpetas
de investigación abiertas, más
que nunca. Pero esto se debe a la acumulación
de causas de años anteriores, no
a la proliferación de nuevos casos.
De hecho, la apertura de expedientes de
investigación nunca había
sido tan baja como en la actualidad. Datos
oficiales muestran que en el primer semestre
de 2008 se iniciaron 151 carpetas, 89 menos
que en el primer semestre de 2007, 133 menos
que en el primer semestre de 2006, 287 menos
que en el primer semestre de 2005, y 550
menos que en el primer semestre de 2004.
Los personajes
ABEL FLEITAS ORTIZ DE ROZAS
OA
Control interno
Depende: Ministerio de Justicia
Investiga: Casos de corrupción
Presupuesto 2008: $ 3.317.207
La apertura de investigaciones es más
baja que nunca. El ministro de Justicia
recortó las atribuciones de los investigadores
de carrera de la OA. No pueden abrir expedientes
ni pedir información a otros organismos
sin la firma de Fleitas.
LEANDRO DESPOUY
AGN
Control externo
Depende: Autonomía funcional
Investiga: Cuentas del Estado
Presupuesto 2008: $ 66.416.034
El kirchnerismo tiene mayoría en
el Colegio de Auditores, en el que se toman
las decisiones. Su presupuesto es de los
más bajos para esos entes en América
latina. La comisión legislativa que
recibe sus informes es oficialista; casi
no se reúne.
JULIO VITOBELLO
SIGEN
Control interno
Depende: Descentralizado del PE
Investiga: Jurisdicciones del PE
Presupuesto 2008: $ 45.446.000
Bajó su perfil y apunta a mejorar
la gestión más que a detectar
irregularidades. La Sigen tiene unidades
de auditoría en los organismos sujetos
a control, pero estas unidades tienen un
alto grado de dependencia respecto de los
entes que auditan.
MANUEL GARRIDO
FIA
Control externo
Depende: De la Procuración General
Investiga: Corrupción de funcionarios
Presupuesto 2008: No tiene
Una resolución de la Procuración
delimitó las atribuciones de la FIA.
No intervendrá en causas judiciales
abiertas contra funcionarios, salvo que
se trate de una denuncia hecha por él
y que el fiscal del caso declare que no
ejercerá la acción penal.