25/10/2008 05:09
Página 12 - Nota - El País
- Pág.6
España no ve problemas
En un operativo de pinzas, el gobierno
español salió a desmentir
cualquier entredicho con la Casa Rosada
por la decisión de estatizar las
AFJP, un hecho que había ayudado
a la caída en las acciones en la
Bolsa de Madrid de empresas españolas
con intereses en Argentina. “Tanto
con Repsol como con Telefónica, las
autoridades argentinas tuvieron una actuación
de tranquilidad, de voluntad de trabajar”,
declaró el canciller Miguel Angel
Moratinos en España. En tanto, el
embajador Rafael Estrella aseguró
que los cambios en el sistema previsional
“no afecta para nada al gobierno español,
ni a las relaciones con la Argentina”.
Como para completar el cuadro, la Cancillería
argentina sacó un comunicado desmintiendo
que el embajador en Madrid, Carlos Bettini,
hubiera sido convocado desde alguna oficina
del gobierno español para transmitirle
su preocupación por la situación.
Moratinos contó que había
hablado en estos días con el canciller
Jorge Taiana y le planteó la necesidad
de que “en los casos de las empresas
más importantes, se clarificasen
una serie de rumores que circulaban”.
Esas versiones que recorrieron Madrid a
las que hacía referencia emparentaban
el gobierno de Cristina Kirchner con el
del venezolano Hugo Chávez, asegurando
que emprendería una campaña
de expropiaciones y estatizaciones de empresas
privadas de capitales ibéricos.
Ante los rumores, el miércoles pasado
el ministro de Planificación, Julio
De Vido, se reunió con autoridades
de YPF y de Telefónica para tranquilizarlos
y desmentir que existieran esos planes.
También el jefe de Gabinete, Sergio
Massa, realizó contactos con otras
empresas.
De acuerdo con el relato que hizo ayer
Moratinos en la conferencia de prensa que
brindó en Madrid –originalmente
para hablar del encuentro que había
mantenido con el canciller de Venezuela,
Nicolás Maduro–, los empresarios
de las firmas españolas quedaron
satisfechos con las explicaciones que le
dieron los funcionarios argentinos.
Quien suele actuar como correa de transmisión
de las preocupaciones de las empresas de
capital español es el embajador Estrella,
quien ayer descartó cualquier malestar.
El diplomático sostuvo que la decisión
de estatizar las AFJP “es una decisión
soberana del gobierno argentino” y
aseguró que “la decisión
no afecta para nada al gobierno español,
ni las relaciones con la Argentina”.
Hubo varias desmentidas. Por ejemplo, subrayó
que en ningún momento Cristina Kirchner
había conversado con Rodríguez
Zapatero sobre estas cuestiones en los últimos
días. En realidad, con quien habló
la Presidenta fue con la secretaria de Estado
para Iberoamérica, Trinidad Jiménez,
con quien mantiene una relación muy
fluida.
Estrella recordó que ambos presidentes
se vieron en Nueva York y que volverán
a coincidir en El Salvador, cuando la semana
que viene participen de la Cumbre Iberoamericana.
El jueves trascendió desde Madrid
el interés de Rodríguez Zapatero
para reunirse con Cristina Kirchner en algún
momento durante la cumbre para conversar
de las cuestiones que le preocupan, incluyendo
los rumores de expropiación –ya
desmentidos– de Aerolíneas
Argentinas, por la que el Grupo Marsans
reclama que le paguen. Sin embargo, el embajador
no quiso confirmar la reunión. “Veo
difícil que puedan mantener un encuentro
bilateral, por la agenda nutrida que tienen”,
sostuvo Estrella.
En el ámbito diplomático
especulaban que si Argentina y Marsans no
logran ponerse de acuerdo en la forma de
transferir Aerolíneas, probablemente
el encuentro entre los presidentes no se
concrete, cuestión de evitar rispideces.
Y si de evitar roces se trata, ayer Estrella
hizo todos los esfuerzos posibles, incluso
dando varias entrevistas radiales para poner
en claro la situación. “La
relación con la Argentina está
muy bien, es fluida y existe comunicación”,
respondió. Ponderó el hecho
que “aún en momentos difíciles
como los que se viven en el mundo, seguimos
trabajando en forma de interlocución
permanente”.
Por su parte, la Cancillería argentina
también quiso mostrar que todo estaba
bien. Sacó un comunicado desmintiendo
“categóricamente” la
información que indicaba que el gobierno
de España había citado a Bettini,
el embajador argentino en Madrid, ante el
envío del proyecto de reforma previsional
al Congreso.
“La convocatoria mencionada nunca
existió y las relaciones entre los
dos países se desarrollan con normalidad
y en un excelente nivel”, afirmó
el Palacio San Martín.