31/10/2008 01:40
Clarín - Nota - El País
- Pág.7
DIFICIL NEGOCIACION CON EL GRUPO MARSANS
Aerolíneas: distensión
tras la reunión de los mandatarios
> El encuentro entre Cristina y Zapatero
despejó los rumores de una expropiación.
Luis Ceriotto
lceriotto@clarin.com
La reunión entre Cristina Fernández
de Kirchner y el Jefe de Gobierno español,
José Luis Rodríguez Zapatero,
descomprimió el clima de negociación
por el traspaso de las acciones de Aerolíneas
Argentinas y Austral. La pulseada entre
el Gobierno y el grupo Marsans, a partir
del encuentro presidencial en El Salvador
(ver página 6) continuará
de esa manera por la vía de la negociación,
aseguraron fuentes vinculadas tanto al grupo
español como desde la Secretaría
de Transportes.
Hasta ese momento, Marsans se había
plantado en reclamar al Gobierno la designación
de un árbitro o "tercer tasador"
que establezca el precio de las dos compañías.
El planteo del grupo español, dueño
del 95% de Aerolíneas y 97% de Austral,
es que de esa manera se puede avanzar con
lo que se estipuló en el Acta Acuerdo
que firmaron con el Gobierno en julio.
Por su parte, desde la Secretaría
de Transportes estaban enfocados en demostrar
que la valuación que hizo el banco
Credit Suisse, por encargo de Marsans, carace
de sustento técnico. Según
el banco, Aerolíneas vale entre cero
y 66 millones de dólares, mientras
que a Austral le asignó un valor
entre 330 y 400 millones de dólares.
La diferencia con la tasación que
hizo el Gobierno es abismal. Según
la valuación del Tribunal de Tasaciones
de la Nación (TTN), Aerolíneas
y Austral tienen un valor de mercado, negativo,
superior a los 800 millones de dólares.
En esa puja, que hasta anoche sólo
mostraba señales de estancamiento,
el Gobierno había decidido aferrarse
a lo que marca la ley de rescate de Aerolíneas,
según la cual la única valuación
posible es la del Tribunal de Tasaciones.
"Hay que seguir los pasos que establece
la ley, según la cual hay plazo para
negociar hasta el 31 de diciembre",
aseguraron fuentes de la Secretaría
de Transportes.
Marsans, en cambio, reclama que se respete
la letra del Acta Acuerdo (firmada un mes
antes que la ley del Congreso, tanto por
el secretario Jaime como por el ministro
Julio De Vido) según la cual si no
hay acuerdo entre las partes se puede llamar
a un tasador de "prestigio internacional".
Para los españoles, a ese árbitro
hay que buscarlo entre las grandes consultoras
contables del mundo, con la excepción
de Price Waterhouse Coopers, que fue la
encargada en los últimos años
de auditar los balances de Aerolíneas
aprobados por Marsans (y, hasta este año,
también por el Estado).
"Si el precio de Aerolíneas
lo debe aprobar el Congreso, que entonces
ese tasador independiente haga su tarea
y vaya a defenderla ante los legisladores.
Y así se despeja la incertidumbre
en todo ésto", fue el razonamiento
de la gente de Marsans. Tras las noticias
que les llegaban desde El Salvador, dieron
por descontado que no hay espacio para un
escenario con expropación de las
acciones por parte de Estado. "Nos
espera un escenario de intenso trabajo la
semana próxima", agregaron.
ANTECEDENTES
• El 17 de julio, el Gobierno y Marsans
firmaron un acta acuerdo, por la cual definieron
un mecanismo para negociar la compra de
las acciones de Aerolíneas y Austral
en manos de Marsans.
• Desde esa fechar el Gobierno desembarcó
en el manejo de la compañía.
Puso como gerente general a julio Alak ya
portó 200 millones de dólares
en 90 días para sanear los crecientes
déficit operativos de las dos aerolíneas.
• El Congreso aprobó la estatización
de las empresas, pero el texto de la ley
impone que la única tasación
válida es la del Tribunal de Tasaciones.
Según este tribunal, Aerolíneas
y Austral tienen un valor negativo de más
de 800 millon es de dólares. En términos
concretos, Marsans debería no debería
cobrar un solo centavo.
• El Acta Acuerdo, en cambio, establece
que hay dos tasaciones, una del comprador
y otra del vendedor, y que si no hay acuerdo
se llama a un árbitro. Eso es lo
que reclama Marsans en estas horas.