MARSANS INCORPORÓ UN A-320 EN AEROLÍNEAS ARGENTINAS, DE ANTIGUA TECNOLOGÍA, PERO AÚN DEBE 17 DE TECNOLOGÍA MODERNA, SEGÚN SUS COMPROMISOS DE INVERSIÓN DESDE OCTUBRE DE 2001.


FLOTA AEROLÍNEAS ARGENTINAS

Los dueños españoles de Aerolíneas Argentinas han difundido, con la profusión mediática que los caracteriza, la incorporación de un A-320 a la flota empresaria.
Es una aeronave fabricada en 1992, similar en consumo de combustible, alcance y pasajeros transportados, a las de las flotas de aviones MD que hoy opera Austral Líneas Aéreas, ya dejados de fabricar.

Con la aeronave sumada, Gonzalo PASCUAL y Gerardo DÍAZ están aún muy lejos de cumplir tanto con los compromisos de compra de Aerolíneas Argentinas asumidos con el Estado español, a través de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), sobre la cantidad de aviones A-320 a incorporar y la modernización de su flota; como los subsiguientes que sobre dicha flota efectuaron en el 2006, a Néstor Kirchner.

Cuando en Octubre de 2001 la SEPI entrega nuestra aerolínea de bandera a Air Comet/MARSANS, ésta se compromete en el contrato de compraventa a ampliar y modernizar su flota, junto con la de Austral, sumándole 23 aeronaves en un lapso que concluía en Diciembre de 2004, durante el cual no existieron medidas de fuerza sindicales. Esa incorporación de aviones, para aumentar los asientos ofrecidos por ambas compañías, incluía 12 que debían ser A-320 (o de estándares similares), pero, a pesar que la SEPI le dio a los dueños de MARSANS USD 248 millones para hacerlo, esa obligación no se cumplió, ni en cantidad, tipo, ni tiempo, acorde a lo estipulado contractualmente.

La necesidad de actualizar tecnológicamente la flota empresaria, también estaba explícitamente reconocida por la SEPI en su documento Aerolíneas Argentinas Solución de Futuro de Octubre de 2001, difundido por Internet, e incluido en la documentación complementaria de la venta. Allí, la SEPI afirmaba que la actual flota de la compañía, “permite un desarrollo limitado en el tiempo, ya que algunas de ellas requieren ser sustituidas para mejorar costes (combustibles), y conseguir relanzar la imagen de modernidad necesaria para el reflotamiento de la empresa”.

En Agosto de 2006, PASCUAL y DÍAZ se comprometen en la Casa Rosada ante Néstor Kirchner, a incorporar 37 aviones para Aerolíneas y Austral entre el 2006 y 2009, invirtiendo USD 1000 millones.

Ese Plan de Inversiones, incluía sumar 4-A320 en el 2007 y 2 A -320 en el 2008.

En total, entre el 2001 y 2008 MARSANS se obligó a sumar a la flota de Aerolíneas Argentinas 18 A-320 que, por mandato contractual y eficiencia de gestión, debían ser de tecnología de última generación, para reducir los costos operativos -hoy pérdidas- de la compañía, y actualizar las prestaciones de servicio ofrecidas por los aviones de ambas empresas, para mantenerse viables y competitivas local e internacionalmente.

Los dueños españoles de Aerolíneas Argentinas, luego del A-320 incorporado, deben aún 17 A-320, modernos tecnológicamente, según sus múltiples planes de inversión anunciados.

Baste solo recordar que su principal competidor local, LAN, ha invertido USD 3200 millones para adquirir (no reservar) 32 B-787 de largo alcance, modelo recién lanzado por Boeing; y está incorporando 68 nuevos Airbus de la familia A-320 (A318, A319, A320 y A321), cuyo precio medio es de USD 73 millones cada uno.

ÁREA TÉCNICA

Otra Área, donde la carencia de inversión producida por MARSANS es generalizada y gravemente crítica, es la Técnica e Industrial de Ezeiza y Aeroparque.

En la actualidad, existen miles de unidad y equipos aeronáuticos sin reparar acumulados en depósitos, tanto por falta de repuestos, bancos de prueba e insumos, como de cobertura de vacantes técnicas. Una enorme cantidad de activos fuera de servicio, que obliga a Aerolíneas Argentinas y a Austral a comprar o alquilar unidades en dólares al exterior, en carácter de urgente o AOG (Airccraft On Ground), como el envío al extranjero de las unidades propias para su reparación, con el fin de lograr la puesta en servicio de sus aviones; o, sino, lleva a la utilización depredadora de otras aeronaves como fuente de provisión de repuestos y equipos- “canibalización”-, que inevitablemente termina en su desguace y baja de la flota.

Prácticas de gestión totalmente anormales derivadas de la profunda desinversión del Área Técnica, que en Aerolíneas Argentinas y Austral son la norma en lugar de la excepción, y cuyo resultado es el aumento de las complicaciones y tiempos del mantenimiento aeronáutico, con la consecuente disminución de la cantidad de aviones operativos. Y, por supuesto, el aumento superlativo e innecesario de los costos empresariales.

En estos días, la ínfima suma destinada por MARSANS al Área Mantenimiento y Reparación, en relación a sus masivas carencias, está casi en su totalidad destinada a la compra de unidades en condición AOG.

EL PACTO TRAMPA DE “PAZ SOCIAL”

Es por ello, que APTA sostiene que el único nombre de la “Paz Social” en Aerolíneas y Austral es: inversiones necesarias y reales; empresarios honestos e idóneos; y un Estado activo, defendiendo el interés público nacional.

La severa crisis de ambas empresas tiene como razón central y excluyente, las políticas empresariales de sus dueños no la de sus sindicatos. Sostener lo contrario, significará no solucionar jamás sus muchos problemas y encima agravarlos, al operar sobre sus efectos en lugar de sobre sus causas.

El pacto de “Paz Social”, por el que MARSANS denodamente presiona -mediante sus habituales operaciones de prensa- a los gremios aeronáuticos para lograr su firma, como insoslayable condición para materializar nuevas y fastuosas promesas de inversión en Aerolíneas Argentinas y Austral, aunque aún no cumplió ninguna de las anteriores, es un malicioso ardid, dirigido en primer lugar, a culpar de toda la falta de inversión pasada en ambas compañías a sus trabajadores y sindicalistas, exculpando simultáneamente a los dueños de MARSANS y; en segundo lugar, para culparlos de toda falta cumplimiento futuro de inversión, al someterlos a un acuerdo de condiciones incumplibles con un método de concertación de fracaso asegurado y, sobre todo, para convertirlos en sus firmes chivos expiatorios, para acusarlos por su abandono de nuestra Aerolínea de Bandera (todavía concursada; con una deuda post-concursal multimillonaria; una flota obsoleta, antieconómica, e insuficiente; un Área Técnica con enorme descapitalización material y humana; un mercado externo aún menor al anterior a 1990; uno interno drásticamente contraído; un servicio deficiente, y un desprestigio creciente), quedando libres de culpa y cargo judicial, social y político tanto Gonzalo PASCUAL como Gerardo DÍAZ, para garantizarse que no se verán afectados sus intereses empresariales futuros como, tampoco, los de las numerosas empresas españolas con inversiones en la Argentina y América Latina. El plan, se completará con la fusión de Austral con Air Comet de España, al igual que sucedió en Chile con Aerolíneas del Sur, Austral que posee alrededor del 56% del mercado de cabotaje; tiene una flota homogénea cada vez más cercana a la necesaria para cubrir su demanda, también obsoleta y antieconómica, pero lo cual le posibilita seguir recibiendo cuantiosos y crecientes subsidios estatales, desmedidamente superiores a los de Aerolíneas Argentinas –al haber perdido participación- denunciados en algunos casos como injustificados y en otros como excesivos. En las últimas compensaciones por combustible, Austral recibió el 90%, LAN el 9%, y Aerolíneas el 1%.

No solo es inédito e insustentable en la historia del capitalismo, que los empresarios supediten las indispensables inversiones de su negocio para crecer y competir, a las decisiones de los gremios de su actividad, sino que vale como caso testigo y ejemplo, de lo falaz de la exigencia de MARSANS de “Paz Social”, el desempeño en el país de LAN: su servicio es eficiente y de calidad; no tiene ni remotamente los problemas sindicales y laborales de las empresas controladas por MARSANS a pesar compartir todos sus gremios excepto UALA; y, crece constantemente tanto en mercado como en inversiones, sin exigir como requisito para hacerlo, que sus gremios firmen un pacto de “Paz Social”.

La única diferencia entre LAN y Aerolíneas Argentinas y Austral, obviamente, son sus dueños, los dirigentes sindicales son los mismos.

LOS DUEÑOS DE MARSANS, DEBEN CUMPLIR CON SUS COMPROMISOS CONTRACTUALES, E INVERTIR EN AEROLÍNEAS Y AUSTRAL LOS USD 758 MILLONES QUE EL ESTADO ESPAÑOL LES DIO.

Tres informes surgidos de organismos del poder ejecutivo español entre el 2006 y 2007, que se complementan con lo denunciado judicialmente hasta principios del 2006 por los Ministerios de Planificación y el de Economía del gobierno argentino,han demostrado indiscutiblemente, que las denuncias por años expuestas por APTA, sobre los incumplimientos contractuales cometidos por MARSANS sobre sus obligaciones de compra con Aerolíneas Argentinas y Austral, como consecuencia del desvío de fondos públicos españoles por USD 758 millones que les fueron entregados por la SEPI/Estado español para sanearlas financieramente y reactivarlas comercialmente, pero que jamás llegaron a sus destinos contractuales, no son suposiciones ni conspiraciones de este Sindicato

Los dos primeros informes que dan cuenta de esos incumplimientos y desvío de fondos españoles, están profusa, rigurosa y objetivamente probados por el Tribunal de Cuentas de España, en sus dos Informes de Fiscalizaciónsobre la compra deAerolíneas Argentinas, Nros.: 705/06 del 13/03/06 y 765/07 del 19/07/07 (ver página del Tribunal de Cuentas www.tcu.es), en los que concluye que las constancias de imputación de esos fondos en la mayoría de los casos son inválidas –no están debidamente acreditada- o son de dudosa credibilidad y validez.

Como así también, se desprende inequívocamente del Informe del perito contable designado por la AEATde España (Agencia Estatal de Administración Tributaria), presentado en Octubre del 2007 en el Tribunal de Instrucción Criminal N: 35 de Madrid, por requerimiento de la Jueza Gemma Gallego, donde PASCUAL, DIAZ y MATA, están imputados porfalsedad documental, estafa procesal, delito tributario y desvío de fondos públicos en relación a su compra y control de Aerolíneas Argentinas y Austral, informe que demostró que los dueños de MARSANS habían defraudado al fisco a través de Air Comet/MARSANS por EUROS 100 millones (EUROS 300 millones actualizado con intereses y punitorios), al no haber registrado créditos comprados contra Aerolíneas Argentinas por USD 300 millones. Por lo cual violaron el contrato de compraventa refrendado por el Consejo de Ministros, que estipulaba que esas deudas debían ser canceladas no compradas por MARSANS, obtuvieron un beneficio ilícito por el 40% de ese monto al presentarse en el concurso de Aerolíneas Argentinas, como desviaron esos fondos del destino contractualmente estipulado, que era reducir deudas de la empresa.

Por su parte, el gobierno de Néstor KIRCHNER rechazó e impugnó judicialmente los balances de Aerolíneas Argentinas durante tres ejercicios consecutivos, 2002, 2003 y 2004, a instancias del Ministerio de Planificación y con la aprobación del Ministerio de Economía, acusando a los dueños de MARSANS de fraude contable, por registrar en los balances de Aerolíneas Argentinas deudas que ya había sido canceladas por 300 millones de dólares (los créditos contra Aerolíneas comprados por Air Comet/MARSANS y denunciados por la AEAT por evasión fiscal al no estar registrados en sus balances). Los fundamentos de esas impugnaciones fueron ampliados ante nuestra justicia, también por los Ministerios de Planificación y Economía en Marzo del 2006, sumando nuevas acusaciones contra MARSANS por aprobación ilícita de su propuesta concursal en Aerolíneas, como su vaciamiento a favor de otras compañías del Grupo MARSANS.

Estos rechazos e impugnaciones por parte del Estado nacional, constituyeron una prueba más de los incumplimientos contractuales por parte de MARSANS, como del desvío de fondos públicos españoles que realizaron, cuyo destino era nuestra Línea Aérea de Bandera y Austral.

El gobierno de Néstor Kirchner aprobó luego el balance 2005 de Aerolíneas, a pesar de que un balance es consecuencia inevitable de los anteriores, en base al acuerdo firmado en Madrid con MARSANS, cediendo a presiones políticas del gobierno de España. Sin embargo, nunca revocó judicialmente ninguna de las acusaciones efectuadas contra PASCUAL, DIAZ y MATA, al impugnar tres balances de Aerolíneas Argentinas.

El gobierno argentino y el español, como consecuencia de los pruebas presentadas por organismos del poder ejecutivo de España, como ante la justicia de ese país y la argentina, tienen la obligación legal, política y moral, de exigir a los dueños de MARSANS que inviertan en Aerolíneas y Austral los USD 758 millones entregados por la SEPI/Estado español para cancelar deudas y aplicar al Plan de Negocios estipulado en su contrato de compraventa, lo cual hasta la fecha no han efectuado.

En defensa del interés público de cada una de sus naciones.
PROPUESTA DE APTA AL GOBIERNO NACIONAL: UNA AUDITORÍA INTEGRAL SOBRE AEROLÍNEAS ARGENTINAS Y AUSTRAL, PARA DETERMINAR SU REAL ESTADO FINANCIERO, PATRIMONIAL Y TÉCNICO. COMO EL CUMPLIMIENTO DE SUS COMPROMISOS CONTRACTUALES POR PARTE DE MARSANS.

APTA reitera a la Presidenta Cristina FERNÁNDEZ de KIRCHNER, su pedido y propuesta, de que la Auditoria General de la Nación, realice una auditoria sobre las compañías controladas por MARSANS, a efectos de conocer su verdadero estado de situación, y el destino dado a los USD 758 millones entregados por el Tesoro español.

Con el fin que tanto las autoridades nacionales como toda la sociedad argentina y la española, conozcan fundada, fidedigna y definitivamente, lo que sucede y sucedió en Aerolíneas Argentinas y Austral desde Octubre de 2001, exenta de manipulación o distorsión informativa alguna, sea mediática y/o política, surgida en Argentina y/o España.

Sino, las autoridades de gobierno, no poseen ninguna razón objetiva y concreta, para solo creer y avalar sesgadamente el discurso, pretensiones y accionar de los dueños españoles de MARSANS; negándoles, discriminatoriamente, toda credibilidad y apoyo, a los dichos, propuestas y acciones de los ciudadanos trabajadores y sindicalistas argentinos, de nuestra Aerolínea de Bandera y Austral.

Los Técnicos Aeronáuticos no detendremos jamás nuestros esfuerzos, hasta lograr que Aerolíneas Argentinas y Austral sean controladas por empresarios genuinos, honestos e idóneos. Empresarios que quieran enriquecerse junto a ellas y no expensas de ellas. Empresarios que quieran hacerlas crecer y no desaparecer.

TAMPOCO PERDEREMOS ESTA LUCHA POR AEROLÍNEAS ARGENTINAS Y AUSTRAL, ¡PORQUE JAMÁS LA ABANDONAREMOS!

Ciudadela, 5 de marzo de 2008.
CONSEJO DIRECTIVO DE APTA