A LOS TRABAJADORES DE AEROLÍNEAS
ARGENTINAS Y AUSTRAL, OPINIÓN PÚBLICA
Y GOBIERNO NACIONAL
LA FALTA CRÓNICA DE INVERSIÓN
EN AVIONES, REPUESTOS Y MANO DE OBRA TÉCNICA,
ES LA CAUSA PRINCIPAL Y DECISIVA DEL GRAVE
DETERIORO OPERACIONAL QUE, DESDE AÑOS,
SUFRE AEROLÍNEAS ARGENTINAS Y AUSTRAL.
Aerolíneas Argentinas y Austral, se
hallan prestando desde hace largo tiempo un
servicio tan insuficiente como deficiente,
que ha dejado a numerosas provincias incomunicadas
vía aérea, y a miles de pasajeros
con constantes demoras y cancelaciones en
sus vuelos, tanto en el país como en
el exterior, contabilizadas en largas horas
de espera que muchas veces se convierten en
días.
Esta crítica situación empresarial,
que se inició con la ominosa administración
de vaciamiento llevada a cabo por IBERIA,
cuando era controlada por el Estado español;
se agudizó hasta casi paralizar a ambas
compañías durante la conducción
de la SEPI, ente del Poder Ejecutivo de España,
durante el año 2001; y, jamás
se terminó de revertir a partir de
Octubre de ese año, cuando la SEPI
entregó a Aerolíneas y Austral
al Grupo español MARSANS, por considerar
que era quien mejor garantizaba el Plan de
Negocios para hacerlas viables y sustentables,
junto con USD 758 millones destinados a sanearlas
financieramente, modernizarlas y reequiparlas
industrialmente.
Ello no se ha cumplido hasta la fecha.
Ni en el período en que fueron
conducidas por Antonio MATA, hasta mediados
del 2006; como con posteridad cuando fueron
gestionadas por las autoridades designadas
por Gonzalo PASCUAL y Gerardo DÍAZ,
dueños controlantes de MARSANS como
de Aerolíneas Argentinas y Austral,
miembros permanentes de los Directorios de
ambas aerolíneas, y responsables máximos
de su administración.
MARSANS no amplió como debía
la capacidad de asientos de nuestra Línea
Aérea de Bandera y Austral, ni actualizó
tecnológicamente sus flotas, sumando
por ejemplo, las 23 aeronaves que le exigía
el contrato de compraventa subscripto con
la SEPI, a las existentes a fines del 2001
durante un lapso de 38 meses, el cual vencía
en diciembre de 2004. Obligación que
expresamente incluía, 12 A-320 o similares
en tipo y tecnología, de lo cuales
aún no hay ninguno; 7 A340, de los
que existen 6 pero únicamente 2 incorporados
por MARSANS y, solo 4 de los obsoletos MD
y/o B737 que paradójicamente, hoy componen
la mayoría de la flota de ambas compañías:
59. Condenándolas a altos costos operativos
(por mayor consumo de combustible), como a
una más asidua desprogramación
de aeronaves por mantenimiento. Sin embargo,
MARSANS cobró de la SEPI los USD 248
millones de dólares asignados para
esa incorporación de 23 aeronaves,
como para la reactivación y actualización
de la planta de mantenimiento y reparación
aeronáutica de Ezeiza y Aeroparque,
que tampoco llevó a cabo. Cabe destacar,
que durante ese período de 38 meses
y hasta diciembre de 2005, hubo absoluta “paz
social” sindical en Aerolíneas
Argentinas y Austral.
Tampoco MARSANS cumplió con sus anuncios
del año 2004, de ampliar y modernizar
las flotas empresarias incorporando 49 aviones
Boeing hasta el 2009, invirtiendo USD 558
millones.
Finalmente, las promesas efectuadas ante
el presidente KIRCHNER en Agosto del 2006,
de sumar 37 aviones hasta el 2009 invirtiendo
USD 1000 millones, tampoco se están
cumpliendo. Del plan presentado para el
año 2006 se cumplió apenas el
30% y del presentado para el 2007, solo el
40%.
Durante todos estos años, además,
se ha mantenido invariable el porcentaje de
flota operativa e inoperativa de Aerolíneas
y Austral: un 40%, para la primera, de sus
aviones fuera de servicio y otro de 25% para
la segunda. Lo cual agudiza la ya
insuficiente cantidad total de aviones que
ambas poseen, incapaz de satisfacer la demanda
de pasajes locales e internacionales.
Otra Área, donde la carencia de
inversión de MARSANS es generalizada
y gravemente crítica, es la Técnica
e Industrial de Ezeiza y Aeroparque. El Centro
de Reparación y Mantenimiento aeronáutico
más importante de la Argentina, creado
y desarrollado por el Estado nacional durante
las cuatro décadas en que fue dueño
de nuestra aerolínea de bandera.
En la actualidad, existen miles de unidades
y equipos aeronáuticos sin reparar
acumulados en depósitos, tanto por
falta de compra de repuestos como de cobertura
de vacantes técnicas. Una enorme cantidad
de activos fuera de servicio, que provoca
un alza similar en los costos empresarios,
al obligar a la compra o alquiler urgente
de unidades, casi totalmente en dólares
y al exterior, para posibilitar la puesta
en servicio de las aeronaves; o sino, a la
utilización depredadora de otros aviones
como fuente de provisión de repuestos
y equipos- “canibalización”-,
que inevitablemente conduce a su desguace
y baja. Prácticas, además, que
aumentan las complicaciones y tiempos de mantenimiento
y reparación aeronáutica, disminuyendo
correlativamente la cantidad de aviones operativos.
A partir de la asunción en el año
2006, de nuevas autoridades en la conducción
empresarial en Aerolíneas y Austral,
APTA pudo mantener con las mismas diversas
reuniones, que le permitieron lograr una resolución
satisfactoria a muchos de sus antiguos reclamos
laborales, salariales y sindicales; como así
también, puntuales mejoras en el gestión
del Área Técnica.
SIN EMBARGO, SIN UNA POLÍTICA EMPRESARIA
AUTÉNTICAMENTE COMPROMETIDA CON INVERSIONES
GENUINAS, MATERIALIZADAS EN UNA FLOTA SUFICIENTE
Y MODERNA; EN INFRAESTRUCTURA TÉCNICA
ACTUALIZADA; Y EN LA DOTACIÓN NECESARIA
DE REPUESTOS Y MANO DE OBRA AERONÁUTICA,
CUALQUIER MEJORA LABORAL Y CAMBIO ORGANIZACIONAL
ES, Y SERÁ, ESTÉRIL.
Pero, los responsables de tal crítica
situación empresarial, como de cualquier
consecuencia para trabajadores y usuarios,
no son solamente los propietarios de ambas
compañías sino también
el Estado nacional. No solo por su actuación
en los ‘90, sino también en la
anterior y actual administración de
gobierno, dado que la gestión de MARSANS
se desarrolló en un 80% desde Mayo
de 2003. Teniendo en cuenta las múltiples
funciones y obligaciones de nuestro Estado,
como regulador y garante de los servicios
públicos, como controlador de las privatizaciones
y, desde noviembre de 2006, como socio minoritario
de MARSANS en un 5%. Luego que el ex presidente
Kirchner aprobara el balance 2005 de Aerolíneas
Argentinas, cediendo a presiones del gobierno
español, mediante pactos políticos
acordados y firmados en Madrid.
Aunque, ese mismo gobierno le rechazó
e impugnó judicialmente los tres balances
anteriores, acusando a sus dueños de
fraude contable, o de presentar balances falsos;
aprobación ilegal de la propuesta concursal
de Aerolíneas; y su vaciamiento a favor
de otras empresas de MARSANS, acusaciones
que nunca revocó ante justicia. Además,
a partir de Agosto de 2006 le ha otorgado
a Aerolíneas Argentinas y Austral los
mayores subsidios al combustible, y ha anunciado
que le comprará a MARSANS pagándole
o condonándole deudas estatales, hasta
un 20% de las acciones de nuestra Aerolínea
de Bandera.
Sin embargo, ni el gobierno anterior
ni hasta ahora el presente, han realizado
una evaluación exhaustiva sobre la
gestión de Aerolíneas y Austral
por parte de MARSANS, verificado la administración
de ambas y, sobre todo, comprobado el cumplimiento
de sus dueños de los compromisos de
compra asumidos en el 2001. Al contrario,
siempre los han avalado públicamente,
y sus funcionarios solo han criticado velada
o directamente por los conflictos empresariales,
a trabajadores y sindicalistas.
Es indudable, que han sido las equivocadas
políticas y decisiones de los gobiernos
nacionales -adoptadas en su máximo
nivel-, cuando no la desidia y la corrupción
anidadas en un Estado ausente o decididamente
hostil al interés público, las
que han posibilitado que Aerolíneas
Argentinas y Austral, hayan llegado a este
grado de decadencia y desprestigio, que amenazan
seriamente su continuidad.
POR LO TANTO, ES INDISPENSABLE Y URGENTE,
QUE EL GOBIERNO NACIONAL EXIJA A LOS DUEÑOS
DE MARSANS, TANTO COMO AUTORIDAD DE CONTRALOR
COMO SU SOCIO EN AEROLÍNEAS ARGENTINAS,
QUE CUMPLAN FEHACIENTEMENTE CON TODOS SUS
COMPROMISOS DE COMPRA.
EFECTUANDO EN NUESTRA LÍNEA AÉREA
DE BANDERA Y AUSTRAL, EL SANEAMIENTO FINANCIERO
Y LAS INVERSIONES REALES IMPOSTERGABLES, PARA
HACERLAS RENTABLES Y VIABLES.
PARA LO CUAL, EL TESORO PÚBLICO ESPAÑOL
LES DIÓ USD 758 MILLONES.
SI, EN VERDAD, EL GOBIERNO POSEE LAS
CONVICCIONES ÉTICAS, INDUSTRIALISTAS
Y NACIONALISTAS, QUE TANTO HA PREDICADO, Y
NO ES LA CONTINUIDAD EN LO AEROCOMERCIAL,
DE LAS PEORES POLÍTICAS NEOLIBERALES.
LO QUE LOS TÉCNICOS AERONÁUTICOS
ESTAMOS DENUNCIANDO Y EXIGIENDO, ES PARA RECUPERAR
PARA NOSOTROS Y EXTRANJEROS, UN SISTEMA DE
TRANPORTE AEROCOMERCIAL NACIONAL IDÓNEO
Y EFICIENTE; PRESERVAR LA INDUSTRIA AERONAÚTICA
ARGENTINA JUNTO CON NUESTRA SOBERANÍA
AÉREA; Y, DEFENDER INCLAUDICABLEMENTE
NUESTRAS PRINCIPALES FUENTES DE TRABAJO.
HOY COMO AYER, Y COMO SERÁ SIEMPRE,
ASUMIREMOS TODAS LAS RESPONSABILIDADES SINDICALES
Y SOCIALES QUE DEBAMOS, Y NO DEJAREMOS DE
ENFRENTAR NINGÚN OBSTÁCULO EMPRESARIAL
Y/O POLÍTICO, HASTA ALCANZAR NUESTROS
OBJETIVOS, QUE SON TAMBIÉN LOS
DEL BIEN COMÚN DEL PUEBLO ARGENTINO.
TAMPOCO PERDEREMOS ESTA NUEVA LUCHA POR AEROLÍNEAS
ARGENTINAS Y AUSTRAL, ¡PORQUE JAMÁS
LA ABANDONAREMOS!
Ciudadela, 17 de enero de 2008.-
CONSEJO DIRECTIVO DE LA ASOCIACIÓN
DEL PERSONAL TÉCNICO AERONÀUTICO
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