Durante 18 meses, el Estado Nacional mantuvo un acuerdo de cooperación entre las empresas LAFSA y Southern Winds, el cual le reportó a ésta última -durante 12 meses- más de tres millones de pesos mensuales; seis meses más por un valor mayor a cuatro millones mensuales y luego la empresa LAN, la subsidió durante cuatro meses. Estos casi dos años de soporte económico fueron implementados para dar oxígeno a una empresa que en aquel entonces estaba al borde de la quiebra.

¿Qué sucedió durante todo ese tiempo? ¿Cuál fue la política implementada por el Sr. Maggio para sacar a la empresa de la crisis? ¿Por qué la empresa continúa al borde de la quiebra a pesar de los millonarios aportes recibidos?

Si la situación empresaria era tan crítica ¿por qué la familia Maggio aceptó esa alianza estratégica sin implementar un plan de salvataje? ¿O era talvez que la decisión de quebrar a la empresa estaba tomada y se aprovechó la situación crítica del mercado aerocomercial argentino para sacar tajada? ¿Qué sucedió con el aporte de cuatro millones de dólares que realizó el empresario Varsasky? ¿Por qué motivo se evitó la venta de la empresa, cuando tres firmes oferentes se presentaron para su compra?
La respuesta a todos estos interrogantes deben obtenerse en la justicia, pero mientras tanto, la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico reclama una solución para todos los trabajadores y para los usuarios del servicio de transporte aéreo de nuestro país.

Esa solución es posible, como fueron posibles en su momento -para situaciones extremadamente críticas- como el despido de 500 trabajadores de Aerolíneas Argentinas durante la crisis del año 2001, el cierre de las empresas LAPA y DINAR y la solución para los compañeros de dichas empresas, con la creación de LAFSA.

Para ello, nuestra asociación dio respuestas contundentes e inmediatas, desde lo sindical y legal, sustentando su accionar con la UNIDAD de sus afiliados, razón por la cual convocamos a todos los trabajadores de SW para que de la misma forma se logre cambiar el rumbo incierto de una política empresarial digna de los años 90.

Ciudadela, 27 de junio de 2005.

Gabriel Morselli
Secretario de Prensa